En una era en la que la tecnología es tan diversa como las personas que la crean, los líderes reconocen cada vez más la importancia de la neurodiversidad en el lugar de trabajo. Un artículo de Harvard Business Review describe la ventaja competitiva de los equipos neurodiversos, destacando su capacidad única para resolver problemas y sus ideas innovadoras.
Isha Dash, con 20 años de experiencia empresarial y tecnológica en diversos ámbitos, como medios de comunicación, entretenimiento, finanzas, servicios públicos y biomedicina asegura que «Después de casi una década dirigiendo equipos que incluyen tecnólogos neurodivergentes y no neurodivergentes, tiene claro que fomentar un entorno inclusivo no es sólo un imperativo moral, sino estratégico».
Estas son las mejores prácticas para dirigir equipos de trabajo neurodiversos.
Crear una cultura de comprensión
Lo primero es la concienciación, entender lo que significa la neurodiversidad es esencial. Reconocer que las personas experimentan e interactúan con el mundo de forma diferente es esencial para lograr interacciones más integradoras.
¿Cómo? Podemos empezar centrándonos en la educación y la formación, aprovechando las investigaciones más recientes y recurriendo a especialistas en la materia.
Después habría que promover la aceptación, es vital crear un entorno en el que se reconozcan y acepten las diferencias. Un entorno de aceptación fomenta la compasión y refuerza un ambiente de equipo unificado. Al cultivar un lugar de trabajo que valore la neurodiversidad, no sólo mejorará su organización, sino que también, según una investigación publicada en el Journal of Autism and Developmental Disorders, mejorará el bienestar de todos los miembros de su plantilla.
Adaptar las estrategias de comunicación
Usar diferentes medios de comunicación, cada persona tiene sus propias preferencias de comunicación. Algunos prefieren los correos electrónicos detallados, mientras que otros prefieren las notas rápidas o las conversaciones cara a cara.
Fomentar múltiples canales de comunicación garantiza que la voz de cada uno se escuche de la forma que más le convenga.
Claridad, concisión y coherencia, esto ayudará a los compañeros de trabajo neurodivergentes a entender mejor sus tareas, así como las normas del lugar de trabajo, a menudo ambiguas y no escritas.
Proporcionar siempre instrucciones, expectativas y plazos claros para evitar confusiones. Repetir la información en diferentes canales de comunicación -por ejemplo, en reuniones y por correo electrónico- puede ayudar a asegurarse de que todo el mundo la entiende. Los directivos también deben mantener sesiones periódicas y directas de feedback con cada empleado.
Personalizar el enfoque
Al dirigir un equipo neurodiverso, es esencial reconocer y adaptarse tanto a los puntos fuertes como a los retos de cada miembro del equipo. Aprovechar las habilidades de cada persona en un proyecto no sólo mejora la calidad, la productividad y la eficiencia, sino que también aumenta la satisfacción laboral. Ser consciente de los retos individuales también permite a los líderes ofrecer asistencia personalizada y oportunidades de crecimiento.
La flexibilidad horaria en el trabajo permite un equilibrio saludable entre trabajo y vida privada reduciendo el estrés y el agotamiento. Por ello, la flexibilidad en los horarios es una forma clave de adaptarse a las necesidades individuales y producir mejores resultados para todos los empleados.
El trabajo a distancia da a los empleados más control sobre su entorno laboral. Esto puede ser especialmente importante para las personas neurodivergentes, que pueden ser especialmente sensibles a los estímulos sensoriales de las oficinas, como el ruido, la luz brillante o los espacios abarrotados. El trabajo a distancia les permite trabajar en entornos que minimizan la incomodidad, lo que puede aumentar significativamente la concentración, la eficiencia y el bienestar.
La tecnología como facilitadora
Utilizar tecnologías y herramientas de asistencia pueden ayudar a los empleados a gestionar sus tareas diarias de manera más eficaz. Algunos ejemplos son las aplicaciones de gestión del tiempo, los sistemas de seguimiento de proyectos, las plataformas de comunicación como Slack o Teams para conversaciones basadas en texto, los servicios de transcripción y las soluciones de IA como ChatGPT y Bard para mejorar la comunicación.
Es muy útil el uso de aplicaciones que te ayudan a organizar reuniones; gestionar tareas para organizar flujos de trabajo; toma de notas que se sincronizan entre dispositivos para mantener la información importante fácilmente disponible.
Para ello, hay que asegurarse que estos recursos son accesibles para todos. Es decir, que todos los miembros del equipo sepan cómo localizar y comprender la información proporcionada. Esta accesibilidad es un elemento clave para fomentar un ambiente integrador en el que todos los empleados tengan las mismas oportunidades de prosperar.
Establecer políticas inclusivas
Contratación y promoción
Para llegar a ser verdaderamente inclusiva con los empleados neurodivergentes, una empresa debe evaluar y actualizar sus políticas y prácticas a lo largo de todo el ciclo de vida del empleado. Las prácticas de contratación neuroinclusivas allanan el terreno de juego para que los candidatos neurodivergentes muestren sus habilidades y se unan a su equipo, pero eso es sólo el principio.
Onboarding
La inclusión debe continuar a través de la incorporación, el proceso de adaptación, la comunicación diaria y la gestión, las revisiones, las oportunidades de desarrollo profesional y el camino para la promoción profesional.
Salud mental
Integrar la salud mental y el bienestar en los valores y el entorno de trabajo de la organización puede mejorar enormemente la implicación y la satisfacción de los empleados, lo que a su vez puede conducir a un mejor rendimiento y a una menor rotación del personal.
Iniciar estas prácticas puede ser tan sencillo como ofrecer horarios de descanso flexibles y poner a disposición de los empleados servicios o recursos de asesoramiento.
Fomentar el liderazgo neurodiverso
Por último, los líderes de equipos neurodiversos también deben animar y orientar a los empleados neurodivergentes para que asuman funciones de liderazgo. Las diferentes perspectivas y puntos de vista son siempre valiosos, y es importante demostrar que la neurodivergencia no es una barrera para el éxito, sino más bien una ventaja.
Conclusión
La implementación de estas prácticas tienen un poderoso impacto. No sólo impulsan la innovación y la productividad, sino que también fomentan una cultura de trabajo que valora la contribución única de cada empleado. Las empresas con más éxito del futuro serán las que reconozcan la ventaja estratégica de los equipos neurodiversos y sepan aprovechar todo su potencial.